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Sabemos que una buena salud oral repercute en una buena salud general. La prevención es el mejor tratamiento que podemos ofrecerle para evitar enfermedades odontológicas. Los avances de la odontología permiten realizar tratamientos muy sofisticados con alto grado de eficacia y éxito para reponer piezas dentales perdidas; sin embargo, no existe nada tan perfecto, funcional y estético como nuestros propios dientes. Por eso queremos ayudarle a conservarlos. La mayoría de los problemas pueden prevenirse siguiendo unas normas elementales en el cuidado de la boca y visitando regularmente al dentista ya que así realizaremos un diagnóstico precoz de cualquier problema y simplificaremos su tratamiento. La prevención debe empezar desde edades tempranas para inculcar unos hábitos correctos de higiene dental a los niños con la finalidad de que mantengan sus dientes durante toda la vida.
Tratamientos preventivos: - Limpieza bucal. - Instrucción en técnicas de higiene bucodental (cepillado, uso de hilo dental y cepillos interproximales). - Sesiones de fluoración (se recomiendan cada 6 meses). - Selladores de fosas y fisuras. - Control de hábitos alimenticios.
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